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A veces, aunque tengamos la mejor intensión, podemos provocar problemas! Cuando rociamos nuestras orquídeas para darles más humedad tenemos que tener cuidado de no hacerlo en exceso y cuidar que no quede ningún depósito en la corona para evitar la pudrición de la misma.
Hay otros aspectos que cuidar también! No recomendamos rociar las plantas a pleno rayo de sol, las gotas actúan como lupas y pueden causar quemaduras. También es importante procurar una buena ventilación para evitar la formación de infecciones por bacterias u hongos, sobretodo cuando hablamos de géneros que tienen las hojas delgadas como las Cymbidium, que siempre serán más propensas a éstas infecciones que las hojas de una Phalaenopsis, por ejemplo.
Respecto al último punto, una buena manera de evitar transferir bacterias es tratar el agua con la que vamos a rociar con el mismo desinfectante que usamos al preparar una ensalada!! Nosotros usamos un desinfectante altamente efectivo hecho a base de Plata Ionizada Estable, un ejemplo es la marca Microdyn®, pero busca el que tengas en tu cocina que seguramente servirá también!
Otro tip: cuando tengas flores cortadas en un jarrón, aplica unas gotas de éste desinfectante; el agua en donde están se mantendrá fresca por más tiempo y así tus flores durarán más!!
*Por cada litro de agua que añadas al recipiente donde las coloques, una gota de Microdyn®.
